200 personalidades del mundo de la cultura y la educación firman un manifiesto por “el futuro” del MACBA.
“El futuro del MACBA está en riesgo y con él, la cultura en Barcelona y la mejora del Raval”. Así comienza el Manifiesto por el futuro del MACBA Salud y cultura, todo para el Raval, firmado por 200 personalidades relevantes del mundo cultural. Este documento pide que el Ayuntamiento ceda la Capella de la Misericòrdia- situado al lado del museo- para su ampliación. El documento surge tras la decisión del Ayuntamiento de llevar al Pleno de febrero el proyecto de transformar la Capella en un ambulatorio para la zona del Raval Norte. Está firmado por figuras como el artista Francesc Torres, el director del Museo Reina Sofia y exdirector del Macba Manuel Borja-Villel o las escritoras Carme Riera y Rosa Regàs.
El MACBA, que cuenta con una cesión de cinco años de la Capella dada por el Ayuntamiento, tiene programado el uso de esta edificación para ubicar su colección permanente: 6.000 obras que no se pueden exponer. El manifiesto explica que ubicar en la Capella el nuevo CAP del Raval Norte significaría “quitar el museo la única posibilidad de crecimiento sostenible y necesario que tiene al lado”.
Existe una solución inclusiva
Es el único edificio que puede conectarse arquitectónicamente con el MACBA. Explica que construir un nuevo “espacio satélite” supondría “construir un nuevo equipamiento en la ciudad, con las dificultades de costes y gestión que ello implica. Según recoge La Vanguardia, el Ayuntamiento baraja que la ampliación del museo se haga en las inmediaciones del mismo, aunque desde el MACBA comentan que desconocen esas intenciones.
No obstante, el texto asegura que “hay una solución que permitiría ampliar y mejorar los dos equipamientos sin tener que renunciar a ninguno”. Esta propone ubicar el ambulatorio, necesario para el barrio, en el edificio Sert, y construir un nuevo edificio colindante. Sería una “solución inclusiva que, sin las prisas electorales, permitiría el desarrollo de los dos proyectos”. El texto finaliza con un “queremos salud, queremos cultura. Todo para el Raval”.