Jane Birkin, Lorde, Bad Gyal, Amaia o Lykke demostraron que aunque Primavera Sound se escriba en femenino, aún queda mucho por hacer.

Aún dura la resaca del Primavera Sound. Y lo que queda, porque promete ser de las gordas. Es lo que tiene una semana ininterrumpida de música ininterrumpida de música- directos en la Apolo, conciertos gratuitos del miércoles, los tres días de festival y la Primavera al Raval del domingo. Toca volver a la vida real y aunque sea tan triste como un concierto de Cigarrettes After Sex o tan decepcionante como la cancelación de Migos, podemos recordar la feliz experiencia con la intensidad de ASAP Rocky o Arctic Monkeys. Ais.

El Primavera Sound aún no ha publicado cifras oficiales pero el festival baraja entre 215.000 y 220.000 asistentes, una cifra histórica. Los organizadores también han anunciado que el público extranjero ha sido del 60%. Quien fue al festival ya pudo darse cuenta de que la mayoría de que el personal hablaba más inglés y portugués que castellano o catalán. No solo ha habido buena música, también intercambio lingüístico.

Las chicas son guerreras

Alfonso Lanza, codirector del Primavera Sound, ha declarado que “no tienen intención de crecer más” ya que “es el festival que querían”. Sin embargo, también ha lamentado el “lamentable estado” del suelo del Parc del Fòrum (a los tropezones nos remitimos” y la  “jornada complicada del viernes”. Con esto último se refiere a la cancelación de última hora de Migos. El público se quedó sin su ración de Hannah Montana pero se saldó con un final galáctico: con Skepta tocando el sábado y Los Planetas ocupando su lugar.

Varios medios se han hecho eco del poderío femenino del Primavera Sound. Quien vivió la elegancia de Jane Birkin, la intensidad de Björk o el descaro de Bad Gyal lo sabe bien. Sin embargo, no hay que olvidar que de las 296 bandas del cartel, solo 77 estaban encabezadas por mujeres. Una cifra mayor que otras citas catalanas como el Cruïlla (16 de 121) o el Rock Fest (9 de 200), pero insuficiente.

 

Primmmavera gastronómica

Otro de los grandes aciertos del Primavera Sound fue la parte gastronómica. El festival apostó por los mejores restaurantes de Barcelona para alimentar a sus hambriento público. En los food trucks que había repartidos a lo largo de los 192.000 metros cuadrados del recinto podías encontrar las albóndigas de A tu bola o las deliciosas tapas de El Quim de La Boqueria ¿El objetivo? Demostrar que en los festivales también se puede comer como es debido.