Millones de personas deciden cada año viajar a Barcelona por su clima, su gastronomía y su increíble oferta cultural.
Gaudí, gastronomía, sol, playa, montaña, cultura… Las razones para viajar a Barcelona y descubrir los secretos de esta ciudad son infinitas. Un dato, según el National Geographic, fue el séptimo destino más popular para viajar en 2017. La Rambla es la calle más transitada de la capital catalana y una de las calles preferidas de los que visitan la ciudad ¿Quieres saber por qué?
La Fuente de Canaletas: los seguidores del FC Barcelona celebran aquí las victorias de su equipo. Un Dream Team que cuenta con más de 340 millones de culés repartidos por todo el mundo; que quieren respirar esencia blaugrana cuando llegan a Barcelona. También se conoce por la leyenda de que si bebes de su agua, volverás a Barcelona.
Los puestos de La Boqueria: muchos viajeros buscan en Barcelona lo que no pueden comer en sus ciudades. La gastronomía mediterránea les encanta y el mejor lugar para probar materia prima de calidad es La Boqueria.
Tapear al aire libre: da igual la estación del año que sea, siempre es buen momento para sentarse en una terraza y disfrutar del sol y las temperaturas suaves (cuando llegan, el resto del año también hay gente pero está hecha a prueba de frío). Unas bravas, un pincho de tortilla o unas croquetas acompañados de una cerveza o un vermut, entre las opciones más populares.
Cultura e historia
La Plaça Reial: primero, porque es la antesala del Barrio Gótico, el más visitado de Barcelona. Segundo, está rodeado de terrazas para disfrutar del ambiente y hay bares de música en directo de reconocido prestigio internacional.
La oferta cultural: La Rambla es una calle repleta de edificios históricos-Palau Moja, Palau Güell, Casa Bruno Cuadros- y todo tipo de arte. Este está presente en la vanguardia del Arts Santa Mónica, los escenarios del Gran Teatre del Liceu y a pie de calle. Todos los días hay una exposición nueva que mirar y un grupo de música al que escuchar.
Gaudí: porque ¿a quién no le gusta Gaudí? La Sagrada Familia, el Park Güell o la Casa Batlló son el motivo por el que millones de personas deciden viajar a Barcelona. No obstante, la ciudad tiene mucho más modernismo que ofrecer. Ellos lo saben y por eso quieren verlo con sus propios ojos.
Los artistas y las floristas: La Rambla se conoce por ser una calle repleta de color. No solo por los emblemáticos puestos de flores, sino por los artistas. Cada día, los retratistas invitan a los paseantes a que se rían de sí mismos y las estatuas del Sombrero Loco o el Ángel dorado esperan a que una moneda les haga cambiar de posición.
El calor del Mediterráneo
El mirador del Monumento a Colón: desde aquí pueden disfrutar de una de las mejores panorámicas que hay de Barcelona. Por eso, las fotos de Instagram más bonitas de La Rambla están hechas desde aquí.
El Maremagnum: la idea de un centro comercial es algo digno de ver. Por eso atrae a tantas personas a lo largo del día. Además, es uno de los sitios más románticos que hay para pasear por Barcelona, especialmente a la hora del atardecer.
El Mar: si hay algo que apasiona a los extranjeros es la idea de ver el Mediterráneo y bañarse en sus aguas. Parten del Pla del Palau, donde se erige el Monumento a Colón, y continúan por la zona del muelle para admirar los barcos y terminar en el barrio de la Barceloneta.