Doña Barcelona es la flor
De las madonas de España
El poeta exorcista
La vida del poeta y cura Jacint Verdaguer (1845-1902) está a la
altura de su obra. Es uno de los representantes más destacados de
la literatura catalana de los últimos siglos, con poemarios como La
Atlántida, Canigó o la oda A Barcelona. Vivió en el Palau Moja de
la Rambla tras ser contratado como cura y limosnero de la familia
del marqués de Comillas: Antonio López. La relación con grupos
que practicaban el exorcismo acabaría provocando su expulsión
del palacio y posterior suspensión como clérigo.
La Atlántida
Uno de los éxitos literarios más importantes de mosén Cinto fue el
poema épico La Atlántida, triunfador indiscutible de los Juegos
Florales que —de manera excepcional— se celebraron en el
Teatro Principal de la Rambla en 1877. Un entorno que el escritor
conocía muy bien puesto que asistía de manera habitual a la tertulia
que tenía lugar en el Café Suizo de la plaza Real. Su extraordinaria
capacidad de observación convirtió algunos elementos
característicos de la Rambla en fuente de inspiración: el
monumento a Colón o la iglesia de Belén.
Admiraba a Colón
Su admiración por Cristóbal Colón hizo que le dedicase un poema
al monumento que se levantó en la parte baja de la Rambla con
motivo de la Exposición Universal (1888). Más arriba, el San
Cristo de la iglesia barroca de Belén también fue objeto de sus
inquietudes literarias. Incluso llegaría a escribir un texto titulado
Lo Jesuset de la porta de Betlem, inspirado en la escultura situada
sobre la puerta lateral de la iglesia (frente al Palau Moja): “Pues la
Rambla de los pájaros se cierra punto por punto a los pies de
aquella vivaracha y venerable imagen, donde nace y se alarga hacia
el mediodía la Rambla de las Flores”.