Después de la reciente 92ª edición de los premios Oscar, celebrada el 24 de febrero del 2019, es un buen momento para recordar las películas españolas que han ganado algún Oscar y, de manera especial, aquellas que han sido rodadas en Barcelona.

Aunque los Oscar son otorgados por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos desde 1929, la categoría de mejor película de habla no inglesa, conocida popularmente como mejor película extranjera, se concede desde 1956.

En estas 64 ediciones, las películas presentadas por la Academia del Cine Español han conseguido el anhelado premio en cuatro ocasiones, siendo la primera vez en 1983 por Volver a empezar de José Luís Garci. Le siguió en 1994 Belle Epoque dirigida por Fernando Trueba, a continuación Todo sobre mi madre de Pedro Almodóvar en el 2000 y, finalmente (al menos hasta ahora), Mar adentro de Alejandro Amenábar en el 2005. Precisamente, las dos últimas citadas han sido rodadas parcialmente en Barcelona, por lo que este artículo está dedicado a Todo sobre mi madre y el del mes de abril tendrá como protagonista Mar adentro.

La decimotercera película del director manchego, Todo sobre mi madre, supuso su consagración internacional definitiva. Se daba el caso, además, de que, por primera vez, Pedro Almodóvar decidió que el escenario principal no fuese Madrid, sino la ciudad de Barcelona. La película se rodó en el año 1998, durante diez semanas, y de las 125 secuencias, 95 están ambientadas en la capital catalana. Estrenada en salas comerciales el 16 de abril de 1999, rápidamente consiguió el reconocimiento de la crítica y del público. Sin duda, es la película con más éxito de Pedro Almodóvar, y el hecho de que se estrenase prácticamente en todo el mundo permitió que muchos descubriesen una “Barcelona cinematográfica”, existiendo un antes y un después de Barcelona como plató internacional.

La película consiguió una cifra impresionante de premios: más de 50 galardones otorgados por festivales y academias cinematográficas, entre ellos, algunos tan valorados como el Globo de Oro a la mejor película extranjera, el premio a la mejor dirección del Festival de Cannes, los premios a la mejor película extranjera en el Reino Unido, Alemania, Francia e Italia, así como el premio del cine europeo y, por descontado, el reconocimiento español con siete premios Goya. Pero, sin duda, el galardón más mediático fue el Oscar a la mejor película de habla no inglesa.

El 26 de abril del 2000, Penélope Cruz y Antonio Banderas, dos estrellas habituales en su filmografía, le entregaban el galardón desde el escenario del Shrine Auditorium de Los Ángeles. Dos momentos de la Gala siguen presentes en muchas personas que esperaban este instante, el grito de “Pedrooo” de Penélope Cruz al anunciar la película ganadora y los más de dos minutos de agradecimientos del director, incluidas vírgenes y santos.

De los múltiples lugares de la ciudad que aparecen en la película, aquí queremos resaltar la primera secuencia en la que vemos Barcelona. Manuela, interpretada de manera magistral por Cecilia Roth, llega en tren desde Madrid, y tras una magnífica vista panorámica nocturna de la ciudad, ésta recorre sus calles en un taxi. El primer lugar que se identifica es el Portal de la Pau, donde se encuentra el monumento a Colón. Aunque, finalmente, en el montaje final de la película solo se aprecia  la base del monumento con sus leones característicos, conocidos como la versión catalana de Trafalgar Square de Londres.

La Rambla y «Todo sobre mi madre»

A pesar de la poca presencia de los alrededores de La Rambla en la película, hay ciertos hechos que relacionan a Pedro Almodóvar con el singular paseo. Así, por ejemplo, en la 14ª Ceremonia de los premios Goya, celebrados el 29 de enero del 2000 en el Auditori de Barcelona, y en los que Todo sobre mi madre fue la gran triunfadora con siete galardones, entre ellos, los de mejor película, dirección y actriz principal para Cecilia Roth, todo el equipo fue a celebrarlo al Café Royale, situado en la calle Nou de Zurbano, al lado de La Rambla.

Otro hecho curioso que vincula a Pedro Almodóvar y su película con La Rambla lo encontramos en la histórica pastelería Escribà, situada en el número 83 de la popular avenida. El 8 de abril de 1999 el teatro Coliseum de Barcelona acogió la presentación mundial de Todo sobre mi madre. El director estaba acompañado por las protagonistas principales de la película: Cecilia Roth, Marisa Paredes, Rosa Maria Sardà, Candela Peña, Antonia San Juan y Eloy Azorín (solo faltaba Penélope Cruz, que estaba rodando fuera del país). Para la celebración que se realizó después del estreno, el cátering fue encargado al pastelero Christian Escribà, el cual, entre otros manjares, creó para la ocasión unos bombones con forma de labios inspirados en el cartel de Todo sobre mi madre.

Precisamente, este cartel, uno de los más reconocibles internacionalmente de la filmografía de Pedro Almodóvar, fue diseñado por Óscar Mariné, y en él destaca el dibujo de una mujer realizado con trazo grueso y con gran protagonismo de unos labios de color rojo intenso. Estos labios inspiradores han convertido el bombón de chocolate blanco, vainilla Bourbon y gelée de frambuesa en todo un clásico de la pastelería que, además, ha evolucionado hacía otra creación en forma de pastelitos hechos con bizcocho de vainilla, crema de chocolate blanco y vainilla, fruta de la pasión y crujiente de avellanas. Así pues, qué mejor que finalizar este artículo con el recuerdo permanente de Todo sobre mi madre en La Rambla a través de una excelente repostería en forma de “beso”.

Eugeni Osácar, profesor titular del Campus de Turisme, Hosteleria i Gastronomia CETT-UB. Doctor en Didáctica de las Ciencias Sociales y del Patrimonio por la Universitat de Barcelona, es experto en turismo cultural y turismo cinematográfico. Entre sus múltiples publicaciones destaca el libro “Barcelona, una ciudad de película” (2018). Se trata de una nueva edición revisada y ampliada, con cinco nuevos capítulos.