Un recorrido en fotos del Barrio Gótico de Barcelona que capturan desde sus rincones más emblemáticos hasta los más misteriosos.

Ciutat Vella es un distrito que fascina tanto a turistas como locales. A los primeros porque pueden vivir en primera persona la Barcelona de Las Ramblas, el mar y Gaudí que han ido a visitar. A los segundos porque es un recordatorio de su historia más antigua, además de estar repleto de rincones y bares que ninguna ciudad ha sido capaz de replicar. Por este motivo, sacar cientos de fotos del Barrio Gótico o escuchar música en directo en la Plaza Real es algo innato en ambos grupos. Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra.

Perderse por las callejuelas del Gótico de Barcelona es volver a la Barcelona medieval, protagonizar las hojas de La Sombra del Viento y tomarte una cerveza en el mismo bar en el Picasso se emborrachaba a absenta. Es una zona que emana misterio los 365 días del año. Capturarlo en imágenes es difícil pero no imposible. Descubre, a través de estas imágenes, los rincones más únicos de este barrio ¿Nos falta alguno?

1. La Plaza Real

Es parada obligatoria para los paseantes que recorren La Rambla por ser una zona repleta de terrazas, la música en vivo en su historia. Se construyó durante el siglo XIX sobre los restos de un convento capuchino y ha sido escenario de los acontecimientos históricos de los últimos siglos. Sus elementos más icónicos son la Fuente de las Tres Gracias en honor a las diosas griegas del encanto, la creatividad y la fertilidad y las farolas, diseñadas por un joven Antoni Gaudí en 1879.

 

2. Catedral de Barcelona

La Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia, también conocida como la Catedral de Barcelona, es un imponente edificio gótico levantado en honor a la copatrona de Barcelona. Aunque a veces pueda estar eclipsada por la Sagrada Familia, no deja de ser una de las visitas imprescindibles de los viajeros que visitan Barcelona o los locales que viven aquí. Entre sus curiosidades está su reconocido claustro de estilo gótico, la cripta de Santa Eulalia y sus cimientos. En ellos se ubica el subterráneo Museu d’Història de la Ciutat de Barcelona con los restos del baptisterio de la basílica paleocristiana.

 

3. Plaza de San Felipe Neri

Es uno de los rincones más melancólicos de Barcelona por la triste historia que relatan sus paredes. En enero de 1938, durante la Guerra Civil, una bomba cayó sobre la iglesia que da nombre a la plaza, matando a 42 personas. La mayoría de ellas eran niños que utilizaban el sótano del edificio para refugiarse de los ataques. De hecho, en las paredes aún quedan los restos de la metralla de este brutal ataque, uno de los peores episodios que vivió Barcelona durante el conflicto.

 

4. Plaza Sant Jaume

Aquí se encuentran los edificios más importantes de la administración catalana: la Generalitat de Catalunya y el Ajuntament de Barcelona. Su importancia como escenario de los acontecimientos históricos más importantes que ha vivido la capital catalana en los últimos tiempos es indiscutible. Se inauguró en el siglo XIX pero su historia se remonta al siglo XIII, cuando la ocupaba la antigua iglesia de Sant Jaume.

 

5. Plaça del Rei

Es, sin duda, la parte de Barcelona que mejor representa su pasado medieval. Se trata de un conjunto monumental rodeado de edificios góticos y renacentistas que suponen todo un regreso al pasado. El más destacable es el Palau Reial Major que consta de varias edificaciones. Uno de ellos es el Salón Tinell, donde tuvo lugar el primer encuentro de Cristóbal Colón con los Reyes Católicos tras descubrir América. Este está coronado por una torre que ofrece unas vistas increíbles de la ciudad. Otras construcciones a destacar son la Iglesia de Santa Ágata, el Palacio de Lloctinent y el Museo de Historia de Barcelona.

 

6. El pont del Bisbe

El puente de la calle del Bisbe, que une el Palau de la Generalitat con la casa dels Canonges, es una fotos del Barrio Gótico de Barcelona más reproducidas. No te dejes engañar por la arquitectura de esta construcción, no es tan antiguo como parece. De hecho, se inauguró en 1928 durante la dictadura de Primo de River y fue un diseño de Joan Rubió, discípulo de Gaudí. La calle del Bisbe no está exenta de mitos y misterios sin resolver. Uno de ellos es el significado de la calavera del puente. Las malas lenguas dicen que predice que Barcelona se derrumbará sobre sí misma. Los más optimistas, que concede deseos. Quién sabe…

 

7. Plaça Nova

Junto al carrer del Bisbe se encuentra la Plaça Nova, que se abre frente la antigua puerta romana de Barcelona, Porta Praetoria. Hasta 1940 fue un espacio cerrado y claustrofóbico, propio de la arquitectura medieval. Aprovechando los destrozos de la Guerra Civil se abrió para construir la Avinguda de la Catedral. En 1991 se instalaron siete grandes letras que formaban la palabra Barcino. Es un poema visual de Joan Brossa en honor al pasado romano de la capital catalana y el elemento más representativo de la plaza.