Un gato muy gordo, bares alternativos, street art, historia… Descubre qué hacer en el Raval, un barrio con una personalidad especial.

Si hace unos años se te ocurría preguntar qué hacer en el Raval, la respuesta era de todo menos bonita. Hasta los años noventa se lo conocía como Barrio Chino o Barrio Rojo, ya te puedes imaginar por qué. Pasear por sus estrechas calles significaba encontrarse con los estratos más marginales de Barcelona. Su lavado de cara empezó tras las Olimpiadas del 92, con la construcción del CCCB, el Macba y la Rambla del Raval, entre otras medidas.

Como pasó con Chueca en Madrid o el East End en Londres, el Raval pasó de ser una madriguera de prostitutas, drogas y lepra a  un nido de artistas y jóvenes talentos. Aunque aún existen algunas zonas poco recomendables, es un must see de los viajeros que visitan Barcelona y los locales que aprovechan el buen tiempo tomando el vermut o perdiéndose en sus tiendas vintage. Si aún tienes prejuicios con este barrio o no lo conoces del todo, te contamos algunas paradas obligatorias para sacarle el máximo partido. Toma nota.

La Boqueria

Es, sin duda, el mercado más famoso de Barcelona (y uno de los mejores del mundo). Aquí acuden desde los cheffs más prestigiosos en busca de ingredientes de primera calidad hasta los turistas atraídos por lo que han leído en las guías o TripAdvisor Barcelona. Al menos una vez en la vida hay que intentar hacerse hueco en El Quim de la Boqueria o el Pinotxo para probar una de sus deliciosas tapas.

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Puesto de frutas en la Boqueria, el mercado de Las Ramblas.

 

Palau Güell

Se encuentra en carrer nou de la Rambla, rozando la calle más emblemática de Barcelona. Fue el primer encargo que Eusebi Güell le hizo a Antoni Gaudí antes de que este se convirtiera en el padre del modernismo catalán. Se terminó de construir en 1890 y aunque la fachada no es tan impactante como la casa Batlló o la Pedrera, su diseño interior y la azotea son una maravilla. Por cierto, en sus chimeneas Gaudí aplicó por primera vez el trencadís, la técnica con la que firmaría sus grandes obras.

Palau Güell
Vista del Palau Güell.

 

Calle Tallers

Es la Meca de los rockeros, heavies y melómano/as de Barcelona. Si buscas alguna rareza musical de ese grupo ochentero que nadie recuerda o le has declarado la guerra a Spotify, en Discos Impacto o Revolver lo encontrarás. Aquí nació la música independiente en Barcelona y aquí se quedará.

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Revolver Music Store | Fuente: Davide Constanzo/Flickr.
Rambla del Raval

La Rambla del Raval es un viaje por las cocinas del mundo, un desfile de terrazas para tomar el aperitivo; una calle flanqueada por palmeras que acoge a gente de todas partes del mundo y la casa de un minino gordo, el Gato de Botero. Es un espacio para visitantes y vecinos, ya que aquí se concentran la mayoría de actividades que se organizan en el barrio, como el Mercado Abierto, conciertos, festivales o ferias.

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El Gato de Botero en el Raval.

 

Bares y restaurantes

Hablar del Raval es mencionar la enorme oferta gastronómica que se concentra en sus calles. En ellas se concentra historia y nuevas tendencias. Lo primero puedes encontrarlo en el Marsella— el bar de absenta favorito de Hemingway o Picasso—, o la emblemática Casa Almirall. Lo segundo, en la kitsch Rosa del Raval, el Nevermind (la meca de los skaters de Barna) o esta oferta de bares originales.

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El Bar Marsella, en el Raval.

 

Filmoteca de Catalunya

En la plaza de Salvador Seguí se encuentra el mayor archivo filmográfico del Estado. El sitio perfecto para ver ese trabajo de cine eslovaco que nadie conoce o descubrir a las jóvenes promesas del cine catalán. En la Filmoteca viven por y para el Séptimo Arte, por eso siempre hay un nuevo ciclo audiovisual al que acudir, una proyección que mostrar o un encuentro al que acudir. Además, la entrada individual no cuesta más de 4€, lo que es de agradecer teniendo en cuenta que Barcelona es una de las ciudades más caras para ir al cine.

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La Filmoteca de Catalunya.

 

Biblioteca de Catalunya

Si buscas un espacio tranquilo para estudiar o trabajar, un archivo cuya existencia desconoce hasta el mismísimo Google o, simplemente, un oasis de paz en plena ciudad, lo has encontrado. Merece la pena que la visites por dentro y admires su sala general o pasees por sus jardines (nada que envidiar a Hogwarts). Además, todas las semanas organizan exposiciones, charlas y encuentros literarios en los que te darás cuenta de cuánto lugar puede ocupar el saber.

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Biblioteca de Catalunya.
MACBA y CCCB

Hace tiempo que Barcelona se convirtió en una ciudad de referencia para las nuevas tendencias culturales y las vanguardias del siglo XXI. Estas se concentran en los museos dedicados al arte contemporáneo de la ciudad: el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Plaça dels Àngels, 1) y el Centro de Cultura Contemporánea (CCCB). Ambos centros actúan como el escaparate de todas las manifestaciones artísticas contemporáneas y los artistas que están marcando tendencia.

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Nit dels Museus en el MACBA.

 

Street art

Es imposible pasear por el Raval y no detenerse a admirar sus paredes grafiteadas o sus fachadas repletas de arte. En la calle de la Cera, donde nació la rumba catalana, hay dos paredes dedicadas a este género musical. En la calle San Pau, esquina Riereta, un mural rinde homenaje al arte de Joan Miró. No nos explayamos porque la gracia del arte urbano es encontrárselo por casualidad.

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Street art en el Raval.

 

Imagen de portada: Jordi Fernández.